Se conoció que Juan Carlos Jiménez Ruffino, más conocido como La Mona, fue condenado por la Justicia de Córdoba este martes.
El fallo, dictado por la jueza de Primera Instancia María Virginia Arato, obliga al artista a abonar una exorbitante suma a su hija no reconocida, en el marco de un juicio por daños y perjuicios al no haberla reconocido como su descendiente.
La demanda fue presentada en 2015 luego de que fracasara una instancia de mediación. En 2021, tras una prueba de ADN, el “rey del cuarteto” reconoció judicialmente su paternidad. Ese mismo año, el Registro Nacional de las Personas inscribió a Natalia con el apellido Jiménez Rufino.
El fallo lo obliga a pagar más de 300 millones de pesos por daños y perjuicios.
“Hoy puedo verme al espejo y decir quién soy (…) Pero no entiendo por qué nunca escucharon mi pedido de hacerlo en silencio, entre nosotros”, indicó Natalia.
Según describe el expediente, la madre de Natalia, Liliana Beatriz Echevarría, conoció a Jiménez durante unas vacaciones en Córdoba, cuando tenía 18 años. La relación se mantuvo en secreto debido a que el artista estaba casado. Al quedar embarazada, Liliana regresó a Buenos Aires.
Con encuentros esporádicos y cartas enviadas por Jiménez a lo largo de los años, la Justicia consideró que esos gestos no fueron suficientes. “Es un fallo histórico por la rapidez del proceso y por la magnitud de la condena”, señaló la abogada de Natalia, Carolina Farías, en diálogo con ElDoce.
Cabe aclarar que el fallo aún puede ser apelado en dos instancias superiores.